Pruebe recibir notificaciones oportunas desde una aplicación confiable (solo unos pocos MB)
Comparte los tiempos de oración con tu círculo como si fueras un nudo en la red de luz: un amigo recibe el aviso, otro comienza el dhikr, otro rompe el ayuno en sincronía. Aquí no estás solo: cada alerta se convierte en eco comunitario.







